JESÚS USÓ VINO Y NO JUGO DE UVA.
Muchos hermanos tratan de convencernos de que Jesús tomó un tipo de vino sin alcohol, esto porque condenan todo uso de licor, y hasta acusan a los católicos de ser borrachos. Pero ¿qué dice la Palabra de Dios?
La promesa de Dios incluía una tierra con vino.
Si Jesús no hubiera querido que tomáramos vino ¿por qué cambiar el agua en vino en las bodas de Caná? (Jn 2). En las bodas judías, la fiesta duraba por lo menos una semana, Gn 29, 27 y Jue 14, 10-12. ¡Jesús duplicó la cantidad de vino!. No es correcto decir que este vino no tenía alcohol. Se usa aquí la misma palabra griega OINOS que Pablo utiliza para decir que no se debe uno emborrachar; también la utilizó para condenar a los corintios por embriagarse en la Cena del Señor. Quiere decir que este "vino" tiene alcohol. Si no, ¿por qué prohibir embriagarse, si es solamente jugo de uva? En Juan 2,7-10, la palabra vino es la misma palabra griega que usa Pablo en su primera carta a Timoteo (3, 8 y 5, 23). ¡El maestresala (mayordomo) de la boda no hubiera dicho qué buen vino era éste si hubiese sido solamente jugo!.
Jesús no se emborrachó, pero sí tomó vino. Los fariseos lo criticaron por no ayunar, hasta le llamaron:
Es claro que la Biblia condena las borracheras (Gá 5, 21; Ef 5, 18). Pero dice otras cosas, sobre el uso del vino también. En el Salmo 10,15 leemos que Dios hace producir el vino que alegra el corazón del hombre. El tomar vino no es igual que el emborracharse. Es la cantidad excesiva lo que es malo. Los diáconos no deben tomar demasiado vino: "no dados a mucho vino, dice Pablo" (1 Ti 3, 8).
La Iglesia católica está contra la borrachera (pero no contra la persona); su sabiduría y su madurez le permite distinguir entre su buen y mal uso. La Biblia dice que juzgar y criticar al borracho es peor que la borrachera misma (Gn 9, 21-27). Al citar a Gálatas 5, 20-21 para criticar a los católicos que se emborrachan, los hermanos olvidan que Pablo también condenó a la vez el sectarismo y las divisiones (versión Latinoamericana), divisiones y partidismos (Dios Habla Hoy).
Los testigos de Jehová celebran su "cena" solamente una vez al año, los presbiterianos cuatro veces al año, los bautistas en general cada mes. Pero la Iglesia Católica sigue a los primeros cristianos que celebraban cada semana (Hch 20, 7 - el primer día de la semana). No pierdas ninguna otra semana sin poder comer el pan de vida que desde el primer siglo comen los cristianos.
"No soy católico romano porque, como evangélico, creo que la participación de la Cena del Señor (o Santa Cena) es una conmemoración simbólica de la muerte de Cristo... y por lo tanto nunca podría creer en las increíbles aserciones de la Iglesia Católica de que sus sacerdotes tienen el poder misterioso de cambiar pan y vino ordinarios en la misma carne y sangre del Señor Jesucristo".
Ahora sabemos, que esta manera de entender el dogma católico, es incorrecta. No es el sacerdote el que hace el milagro, sino el Espíritu Santo mismo, por medio de él. No es que creamos porque entendamos cómo es que el pan se convierte en el cuerpo de Cristo. Creemos porque Jesús lo dijo: "Él tiene palabras de vida eterna".